Wilma, el poderoso huracán que azotó a Cancún hace 15 años
Un día como hoy pero de 2005, Wilma arribó como huracán categoría 5 al Caribe mexicano y permaneció durante 72 horas con lluvias torrenciales y vientos de hasta 295 kilómetros por hora. El saldo: cinco pérdidas humanas y daños en infraestructura valuados en 67.5 millones de dólares.
De acuerdo con un reporte Protección Civil, en el año 2005 se presentaron 23 fenómenos, de los cuales 12 alcanzaron la categoría de huracán, y “Wilma” se convirtió en el tercero en alcanzar la categoría 5 en la escala de Saffir-Simpson.
Además de los daños que se registraron en Cancún, el huracán “Wilma” afectó a la Península de Yucatán por su intensidad y el tiempo que permaneció sobre ella; Playa del Carmen, Cozumel e Isla Mujeres, fueron zonas que también sufrieron impactos importantes. En Yucatán, ese fenómeno afectó por los vientos y las lluvias.
¿Cuándo se formó el huracán?
La depresión tropical que dio origen al huracán “Wilma” se formó el día 15 de octubre, en una zona de fuerte inestabilidad localizada a 930 km al este-sureste de Cancún. Luego, se intensificó con un movimiento errático hacia el sur.
El 17 de octubre pasó a ser la tormenta tropical “Wilma”, con vientos de 65 km/h y una presión de 1000 mb. Al día siguiente era huracán categoría 1 y se desarrolló rápidamente hasta alcanzar la categoría 5 el día 19, con vientos máximos de 270 km/h y rachas de 315 km/h.
Pérdidas millonarias en Quintana Roo
"Wilma", el poderoso huracán que azotó a Cancún hace casi 15 años
En el mes de octubre, este huracán tuvo un gran impacto socioeconómico en los estados de Yucatán y Quintana Roo, convirtiéndose en el fenómeno que generó mayores pérdidas económicas en la historia del Estado, y se estimaron en poco más de 67.5 millones de dólares.
“Wilma” mantiene tres récords: es el huracán más poderoso del Atlántico, es el que se intensificó más rápido en la historia del mundo y es el ciclón con el “ojo de alfiler” más pequeño de la cuenca atlántica.
El pasado 7 de octubre los vecinos salieron desde temprano a hacer el recuento de los daños, tras el paso del huracán Delta por las costas del norte de Quintana Roo: “con Wilma estuvo mucho peor”, fue la frase más repetida por cualquier calle que se transitara, en medio de decenas de árboles derribados por el viento.