Gisèle Pélicot Relata su Atroz Experiencia ante el Tribunal de Aviñón
En una impactante declaración ante el Tribunal de Aviñón, Gisèle Pélicot ofreció un desgarrador testimonio sobre el prolongado abuso al que fue sometida por su esposo, Dominique Pélicot. Durante casi una década, Gisèle fue víctima de una serie de atrocidades que incluyeron drogadicción y explotación sexual, perpetradas por su marido y más de 80 hombres. Este caso ha causado conmoción y repulsión, destacando la extrema brutalidad y la perversión de los actos cometidos.
Gisèle describió cómo, a lo largo de siete años, fue drogada y vendida como un objeto sexual en una web pornográfica. Explicó que su esposo, que inicialmente parecía un hombre encantador y dedicado a su familia, tenía un lado oscuro del cual ella no tenía conocimiento. El 2 de noviembre de 2020, cuando la policía le mostró las fotografías y videos grabados por su marido, su mundo se desplomó de manera devastadora. Estas imágenes, que sumaban 4.000, incluían escenas de violaciones y prácticas sadomasoquistas, mostrando a Gisèle en una situación de total deshumanización y abuso.
Durante su testimonio, Gisèle relató cómo su esposo la utilizó como una "muñeca de trapo", despojándola de su dignidad y tratándola como un objeto de crueldad gratuita. Afirmó que los actos no solo fueron una violación de su cuerpo, sino también una tortura psicológica que convirtió su vida en una pesadilla. La crudeza de las imágenes que mostró su esposo no solo reflejaba abusos sexuales, sino una serie de escenas masoquistas en las que ella era sometida a un trato brutal.
A pesar de los intentos de algunos de los hombres que la violaron por minimizar su implicación, alegando que solo asistieron como espectadores a prácticas de "amor libertino", Gisèle rechazó enérgicamente estas defensas. Aclaró que nunca había participado en tales comportamientos y que las afirmaciones de sus agresores solo constituían nuevas formas de vejación y manipulación. Su testimonio reflejó un firme rechazo a cualquier intento de justificar o minimizar el sufrimiento que sufrió.
Gisèle concluyó su declaración con un agradecimiento sincero hacia las autoridades que descubrieron los abusos. Expresó que, aunque su vida había sido destruida, la intervención de la policía le permitió enfrentar la realidad y comenzar el arduo proceso de reconstrucción personal. Su declaración no solo desnudó las atrocidades que sufrió, sino que también resaltó el coraje necesario para enfrentar y superar un trauma tan profundo y devastador. La valentía de Gisèle en el tribunal subraya la importancia de la justicia y la necesidad de enfrentar con firmeza los abusos de poder y violencia sexual.