Estados Unidos Reubica a los Hijos de "El Chapo" en Prisiones por Acusaciones de Narcotráfico y Crimen Organizado


Los hijos de Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, Ovidio y Joaquín Guzmán López, han sido trasladados a diferentes prisiones en los Estados Unidos tras ser detenidos bajo graves acusaciones de empresa criminal, narcotráfico y crímenes violentos. Estos movimientos forman parte de las medidas de seguridad tomadas por las autoridades estadounidenses mientras los hermanos enfrentan cargos que podrían acarrear severas sentencias. Ovidio Guzmán, apodado ‘El Ratón’, fue detenido en enero de 2023 en Culiacán y, según informaron sus abogados, ha requerido atención médica debido a una cirugía mayor que comprometió casi por completo su estómago, lo que ha suscitado especulaciones sobre su estado de salud actual.

Joaquín Guzmán López, por su parte, fue arrestado el 25 de julio en un aeropuerto cercano a El Paso, Texas, junto con el reconocido capo Ismael ‘El Mayo’ Zambada. Las capturas de estos personajes clave del Cártel de Sinaloa han sido un golpe importante contra la organización criminal, que ha estado involucrada en una serie de actividades ilícitas, desde el tráfico de drogas a nivel internacional hasta crímenes violentos y lavado de dinero. Ambos hermanos están bajo la mira de la justicia estadounidense, que busca desmantelar las estructuras delictivas de las que forman parte.

Hoy por la mañana, ‘El Mayo’ Zambada comparecerá ante el juez Brian Cogan en Nueva York, donde se llevará a cabo su audiencia de presentación de cargos. Las acusaciones que enfrenta son de gran peso, incluyendo el narcotráfico, crimen organizado y lavado de dinero, delitos que han afectado a Estados Unidos y otros países en el marco del tráfico internacional de drogas. Este tribunal no es ajeno a figuras del narcotráfico, ya que aquí mismo fue condenado Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán en 2019, así como el ex Secretario de Seguridad Pública de México, Genaro García Luna.

La reubicación de los hermanos Guzmán en prisiones estadounidenses también obedece a la necesidad de asegurar que las operaciones del Cártel de Sinaloa no puedan continuar bajo su liderazgo. Las autoridades estadounidenses han intensificado las medidas para evitar que los reclusos de alto perfil sigan teniendo influencia sobre sus organizaciones criminales mientras están encarcelados. Este es un paso crucial en el esfuerzo por detener el poder de las grandes organizaciones delictivas que operan desde dentro y fuera de las prisiones.

La captura y procesamiento de los hijos de ‘El Chapo’ refleja la colaboración entre México y Estados Unidos en la lucha contra el narcotráfico. Si bien la operación ha sido exitosa en términos de capturas, las autoridades están conscientes de que el cártel sigue operando bajo otras figuras. No obstante, con estos juicios en marcha, se espera que la estructura de poder del Cártel de Sinaloa siga desmoronándose, enfrentando mayores desafíos para mantener su control sobre el tráfico de drogas y otras actividades ilícitas.