GRAN AFLUENCIA EN EL MERCADO PRINCIPAL DE CAMPECHE POR PREPARATIVOS DE DÍA DE MUERTOS
En los últimos días, el mercado principal de Campeche ha registrado una notable afluencia de personas, que acuden a abastecerse de productos necesarios para preparar sus ofrendas de Día de Muertos. Esta festividad tradicional, que honra a los fieles difuntos, es una de las más significativas para los campechanos, quienes se aseguran de adquirir los ingredientes esenciales para sus altares y platillos típicos. La carne de cerdo y pollo, la masa y las hojas de plátano, utilizadas en preparaciones como el pibipollo, son de los artículos más solicitados.
Los pasillos del mercado Pedro Sainz de Baranda están llenos de color y aromas, donde se observan puestos repletos de dulces tradicionales, frutas variadas y flores, especialmente el cempasúchil, que es un elemento esencial en las ofrendas. Estos productos no solo permiten decorar los altares, sino que también evocan el respeto y el cariño que los habitantes de Campeche sienten por sus seres queridos ya fallecidos.
Los comerciantes del mercado han expresado su satisfacción por el incremento en las ventas, destacando que la temporada de Día de Muertos es una de las más importantes del año. Señalan que la demanda actual no solo beneficia a sus negocios, sino también a la economía local, al fomentar el movimiento de productos agrícolas, cárnicos y de elaboración artesanal. Por otro lado, los clientes encuentran en el mercado todo lo necesario para armar sus ofrendas en un solo lugar, facilitando sus compras y preparativos.
La atmósfera festiva del mercado es palpable, con familias enteras participando en las compras para los altares de sus seres queridos. El Día de Muertos no solo representa una ocasión para recordar y homenajear a los difuntos, sino que también fortalece los lazos familiares y comunitarios. Los habitantes de Campeche mantienen vivas estas tradiciones que han pasado de generación en generación, reafirmando su identidad cultural y su conexión con el pasado.
Así, el Día de Muertos se convierte en un momento especial en Campeche, que va más allá de las creencias y prácticas religiosas, impulsando también la economía local y reforzando el sentido de pertenencia entre sus habitantes.